Sentencia Penal Nº 123, Audiencia Provincial de Ourense, Rec 63/97 de 29 de Septiembre de 1998

La Sentencia de Tribunal Supremo, entre otras, de 25 de Febrero de 1.985, señala como elementos esenciales del delito de estafa: l) Un engaño precedente o concurrente que viene a constituir la ''ratio esendi'' de la estafa, y está constituido por el ardid, imaginación, simulación y mendacidad o falacia, empleados por el sujeto activo del delito. 4) Una relación de causalidad eficiente entre engaño y perjuicio. 5) Ánimo de lucro del sujeto activo del delito, bien sea en beneficio propio o ajeno, bien se consiga tal lucro o no logre alcanzarse. Aplicando tal doctrina jurisprudencia al supuesto concreto objeto de enjuiciamiento, no pueden entenderse concurrentes tales elementos, integradores del delito de estafa, en la conducta del acusado, que no empleó engaño, ni maquinación o simulación adecuados y suficientes para provocar error en el propietario del camping, que conociéndolo con anterioridad, o siendo en cierto modo, amigo del acusado, pues no otra cosa puede deducirse del hecho de no exigirle anticipo previo, como venía siendo habitual en el sistema de contratación de bungalos, debía conocer la oscilante situación económica del acusado, y pese a ello celebró contrato en las condiciones ya antedichas; evidentemente se perjudicó, pero no porque fuese víctima de un engaño, o ardid del acusado, sino por su exceso de confianza lo que en modo alguno puede tener relevancia penal, sin perjuicio de que la conducta del acusado, de no abonar la factura constituya claramente un ilícito civil. Se absuelve al acusado.