Sentencia Penal Nº 56, Audiencia Provincial de A Coruña, Rec 202798 de 25 de Marzo de 1998

El recurso formulado por la representación de Salvador José G, en esencia, se fundamenta en el error en la valoración de las pruebas practicadas.Las alegaciones expuestas en tal sentido no pueden prosperar, y ha de mantenerse la resolución impugnada, toda vez que, efectivamente, no puede considerarse acreditada la versión sostenida por el recurrente, que formuló denuncia contra el Sr. J quién a su vez la había formulado contra aquél; y as! no puede considerarse que exista prueba suficiente, únicamente prestaron declaración los implicados, que permita apreciar la concurrencia de la falta de coacciones del articulo 620.2 del Código Penal, por la que se formuló acusación, y que si bien Andrés J, reconoce que su empleado le dijo al Sr. L que no podía entrar en la oficina, que forma parte de un bajo, ello en modo alguno es constitutivo de infracción penal, toda vez que el local así como todo el bajo donde esta instalada la oficina pertenece proindiviso al Sr. J y al Sr. G, pero no al Sr. L, padre del última, y aún cuando el recurrente sostiene que le había otorgado un poder a su padre, ello carece de trascendencia porque el referido local lo viene utilizando el Sr. J, y en definitiva, las decisiones que afecten al bajo han de ser tomadas por los comuneros, y al respecto nada consta sino únicamente las discrepancias surgidas a causa de unas obras que el recurrente efectuó. Se desestima el recurso.