Sentencia Penal Nº 99/2006, Audiencia Provincial de Pontevedra, Sección 4, Rec 5066/2005 de 03 de Mayo de 2006

Respecto a la valoración atribuible a la exposición de personas en quienes concurre la condición de perjudicado, a la que también se alude por la parte recurrente, hay que afirmar que, desde una óptica de generalidad debe sostenerse, siguiendo el esquema de la mayoría de la doctrina jurisprudencial, el principio de que la declaración testifical de la parte interesada constituye, por sí sola, un medio probatorio hábil y legitimo para desvirtuar la presunción de inocencia, pues el ordenamiento español no excluye el contenido probatorio que puedan ofrecer las manifestación de los perjudicados por el delito, de forma que su declaración puede entenderse como prueba suficiente de cargo, si no constan en la causa indicios contrarios a su verosimilitud, a ello debe añadirse el valor decisivo de la inmediación que permite al juzgador de instancia ponderar elementos de convicción a veces indescriptibles, para formar soberanamente la apreciación en conciencia de los hechos y conceder mayor credibilidad a una de las versiones, como efectivamente se hace en la resolución recurrida.