Sentencia Civil Nº 166/2004, Tribunal Supremo, Sala de lo Civil, Sección 1, Rec 1292/1998 de 12 de Marzo de 2004

El Tribunal estima el recurso de casación sobre juicio de testamentaría. La cuestión es la ineficacia de la ordena dada a un banco por un cliente para repartir entre sus sobrinos la cantidad depositada en él, una vez se conozca su fallecimiento. Se pierde la eficacia por la muerte de la ordenante, no es considerado un testamento ológrafo ya que no se incorporó a los autos, ni consta presentado ante el Juzgado para su protocolización. No existió testamento en el caso, por lo que se impide conceder trascendencia al hecho de que la causante encomendara al banco la distribución del dinero entre los parientes. Al no existir la donación mortis causa, se entiende que el dinero forma parte del patrimonio de la causante debiendo integrarse al haber hereditario que debe distribuirse entre sus designados herederos.