Sentencia Civil Nº 182/2004, Tribunal Supremo, Sala de lo Civil, Sección 1, Rec 1275/1998 de 17 de Marzo de 2004

El arrendador de un contrato de arrendamiento rústico ve estimado su recurso resolviéndose el citado contrato. Por los daños producidos en la finca arrendada.Se acoge el motivo que aduce infracción de la prueba pericial. No se puede negar unos daños y minimizarlos por los beneficios inmediatos que su causación podía reportar al arrendatario. El arrendatario incumplió las pautas que la Administración competente le dictaba. Alteró con ello toda la finca, disminuyó la vegetación que servía de refugio a la caza mayor y causó graves perjuicios. Concurrió por tanto la causa de resolución del contrato prevista en el art. 75 de la LAR por no ser aceptable la visión de los conceptos "daños" y "negligencia manifiesta" que se desprende de la motivación de la sentencia impugnada.