Sentencia Penal Nº 106, Audiencia Provincial de Pontevedra, Rec 102 de 02 de Octubre de 2000

El motivo que invoca el recurrente se basa en alegar la violación del principio de presunción de inocencia, motivo que no puede prosperar pues se asienta en meras alegaciones sin base ni soporte alguno. En primer lugar se ha de indicar que el principio que se dice vulnerado opera sobre la ausencia de pruebas para poder inferir la participación del individuo en el hecho criminal que se le imputa no sobre la valoración de las existentes que efectúen los Juzgadores de instancia. A partir de ello es incuestionable que los hechos declarados probados tienen suficiente apoyo en las pruebas practicadas de cuyo resultado viene a desprenderse que el acusado no sólo superaba la tasa alcohólica permitida, sino que presentaba unos síntomas externos de intoxicación etílica, tan evidentes y claros, como que, no mantenía la verticalidad, se dormía, fue incapaz de realizar la prueba Romberg, etc., según la declaración testifical prestada en el acto del juicio oral por los dos Guardias Civiles que intervinieron en el atestado, si a lo anterior unimos la forma en que se produjo el accidente de circulación, llegamos a la conclusión de que la actividad probatoria llevada a cabo destruye la presunción de inocencia y justifica plenamente la condena impugnada, procediendo en su consecuencia la desestimación del recurso.