Sentencia Penal Nº 30, Audiencia Provincial de Pontevedra, Rec 1029 de 22 de Mayo de 2001

La sentencia apelada razona perfectamente los sucesivos indicios que vienen a constituir la prueba de cargo suficiente para castigar al acusado como autor de un delito de art. 368 del Código Penal, de los que los más relevantes son las importantes cantidades de droga y de dinero que le fueron ocupados. Puede entenderse la actitud evasiva del acusado en el momento de ser detenido, por ser compatible con la de un simple consumidor. Pero los argumentos del apelante para justificar aquellos indicios inculpatorios no pueden ser de recibo sobre todo porque le falta su base fáctica al no acreditar su condición de consumidor. Esta prueba es exigible al acusado porque es él quien alega ese hecho, y además implica un consumo importante, proporcionado a la cantidad de droga ocupada, lo que en principio parece facilitar esa prueba. Sin embargo no se acredita esa condición de consumidor, y sin ella tampoco puede entenderse justificada la tenencia de un total de 81,300 gramos de resina de cannabis repartida en 15 trozos. Se desestima el recurso.