Sentencia Social Nº 62/2005, Tribunal Superior de Justicia de La Rioja, Rec 42/2005 de 03 de Marzo de 2005

El TSJ confirma la improcedencia de despido de trabajadora actora, recurrente en suplicación, al desestimar recurso interpuesto por esta. Declara la Sala que, para que opere el desplazamiento al empresario del onus probandi no basta simplemente con que el trabajador tilde el despido de discriminatorio, sino que ha de acreditar la existencia de indicios que generen una razonable sospecha, apariencia o presunción en favor de semejante alegato y, presente esta prueba indiciaria, el empresario asume la carga de probar que los hechos motivadores de la decisión extintiva constituyen una legítima causa de despido y se presentan razonablemente como ajenos a todo móvil atentatorio de derechos fundamentales". Y en el caso de autos no está presente esa prueba indiciaria.